Música de José Padilla (1889-1960) y dedicada a su querido amigo Don José Pérez de Rozas, con letra de Armando Oliveros y José María Castellví, redactores del diario de Barcelona El Liberal; fue estrenado por Mary Focela en el teatro "El Dorado" de la ciudad Condal en septiembre de 1914, pero quien lo popularizó fue la famosa cupletista Francisca Marqués López, más conocida como Raquel Meller (1882-1962):
I
El día de San Eugenio,
yendo hacia el Prado, le conocí.
Era el torero de más tronío
y el más castizo de "to" Madrid.
Iba en calesa, pidiendo guerra,
y yo, al mirarle, me estremecí.
Él, al notarlo, salió del coche
y muy garboso vino hacia mí.
Tiró la capa con gesto altivo,
y, descubriéndose, me dijo así:
ESTRIBILLO
Pisa, morena,
pisa con garbo,
que un relicario,
que un relicario,
me voy a hacer
con el trocito
de mi capote
que haya pisado
que haya pisado
tan lindo pie.
II
Un lunes abrileño
él toreaba, y a verle fui.
Nunca lo hiciera, que aquella tarde
de sentimiento, creí morir.
Al dar un lance,
cayó en la arena;
se sintió herido
miró hacia mí.
Un relicario sacó del pecho,
y yo al instante reconocí
cuando el torero caía inerte,
en su delirio decía así:
(Estribillo)